domingo, 8 de diciembre de 2024

Los músicos de Crónicas marcianas. Ray Bradbury

   Los músicos

    Los niños daban largos paseos por el campo marciano. De cuando en cuando abrían las olorosas bolsas de papel y metían allí las narices y respiraban el penetrante aroma del jamón y de los encurtidos de con mayonesas y escuchaban el gorgoteo de la naranjada gaseosa en las botellas tibias. Balanceaban las bolsas de comestibles, repletas de cebollas verdes, acuosas y limpias, de olorosas salchichas, de roja salsa de tomate y de pan y se desafiaban mutuamente a desobedecer las órdenes severas de las madres. Corrían gritando:

    - ¡El primero se lleva todo!

    Paseaban en verano, otoño o en invierno. En otoño era más divertido, pues imaginaban entonces que arrastraban los pies entre las hojas otoñales de la Tierra

    Avanzaban imponiéndose silencio, unidos codo con codo, agitando sus palos, recordando que sus padres les habían dicho: "¡Allá no!" ¡A ninguna de las ciudades viejas! Cuidado a dónde vas. Recibirás la paliza más grande de tu vida cuando vuelvas a casa. "Te miraremos los zapatos".

    Una niña decía: "Aquí no hay nada". Y de pronto uno de ellos echaba a correr y entraba en la casa de piedra más próxima, cruzaba la sala y entraba en el dormitorio sin mirar alrededor comenzaba a dar puntapiés y a moverse con pasos arrastrados, y las hojas negras y quebradizas, volaban en el aire. Detrás de un niño corrían otros seis, y el primero hacía de músico, tocando los blancos huesos xilofónicos que yacían bajo los copos cenicientos. Una enorme calavera aparecía a veces rodando, con una bola de nieve y los niños gritaban. Las costillas parecían patas de araña y lloraban como un arpa de sonidos apagados, y los negros copos de la mortalidad volaban alrededor de la arrastrada danza de los niños. Se empujaban unos a otros y caían entre las hojas, en la muerte que transformado a los muertos en copos y sequedad, en un juego de niños con estómagos donde goteaba la naranjada gaseosa. (...).

    Luego de los niños, de rostros luminosos de sudor mordisqueaban el último emparedado. Y después de un puntapié fina, de un último concierto de marimba, de una última arremetida al montón de hojas otoñales, volvían a sus casas. Las madres les examinaban los zapatos en busca de copos negros y una vez descubiertos, venían los baños calientes y las palizas paternas...

                                                              Crónicas marcianas. Ray Bradbury.

                                            

domingo, 1 de diciembre de 2024

La pieza ausente de Pablo De Santis

Comencé a coleccionar rompecabezas cuando tenía quince años. Hoy no hay nadie en esta ciudad -dicen- más hábil que yo para armar esos juegos que exigen paciencia y obsesión. 
 Cuando leí en el diario que habían asesinado a Nicolás Fabbri, adiviné que pronto sería llamado a declarar. Fabbri era el director del Museo del Rompecabezas.
Tuve razón: a las doce de la noche la llamada de un policía me citó al amanecer en las puertas del museo. Me recibió un detective alto, que me tendió la mano distraídamente mientras decía su nombre en voz baja -Laínez- como si pronunciara una mala palabra.
 Le pregunté por la causa de la muerte: "Veneno"- dijo entre dientes. Me llevó hasta la sala central del museo, donde está el rompecabezas que representa el plano de la ciudad, con dibujos de edificios y monumentos. 
Mil veces había visto ese rompecabezas: nunca dejaba de maravillarme. Era tan complicado que parecía siempre nuevo, como si, a medida que la ciudad cambiaba, manos secretas alteraban sus innumerables fragmentos. Noté que faltaba una pieza. Laínez busco en su bolsillo. Sacó un pañuelo, un cortaplumas, un dado, y al final apareció la pieza. "Aquí la tiene". 
Encontramos a Fabbri muerto sobre el rompecabezas. Antes de morir arrancó esta pieza. Pensamos que quiso dejarnos una señal. Miré la pieza. En ella se dibujaba el edificio de una biblioteca, sobre una calle angosta. Se leía en letras diminutas Pasaje la Piedad. -
Sabremos que Fabbri tenía enemigos-dijo Laínez. Coleccionistas resentidos, como Santandrea, varios contrabandistas de rompecabezas, hasta un ingeniero loco, constructor de juguetes, con el que se peleó una vez. 
-Troyes-dije. Lo recuerdo bien. -También está Montaldo, el vicedirector del museo, que quería ascender a toda costa. ¿Relaciona a alguno con esa pieza?
 Dije que no. ¿Ve la B mayúscula, de Biblioteca? Detuvimos a Benveniste, el anticuario, pero tenía una buena coartada. También combinamos las letras de la Piedad buscando anagramas. Fue inútil. Por eso pensé en usted. 
 Miré el tablero: muchas veces había sentido vértigo ante lo minucioso de esa pasión, pero por primera vez sentí el peso de todas las horas inútiles. El gigantesco rompecabezas era un monstruoso espejo en el que ahora me obligaban a reflejarme. Solo los hombres incompletos podíamos entregarnos a aquella locura. Encontré (sin buscarla, sin interesarme) la solución. -Llega un momento en el que los coleccionistas ya no vemos las piezas. Jugamos en realidad con huecos, con espacios vacíos. 
No se preocupe por las inscripciones en la pieza que Fabbri arrancó: mire mejor la forma del hueco. Laínez miró el punto vacío en la ciudad parcelada: leyó entonces la forma de una M. Montaldo fue arrestado de inmediato.
 Desde entonces, cada mes me envía por correo un pequeño rompecabezas que fabrica en la prisión de madera y cartones. Siempre descubro, al terminar de armarlos, la forma de una pieza ausente, y leo en el hueco la inicial de mi nombre.
 Actividad final para afianzar secuencia Lectura del texto La pieza ausente. 
Repaso de las características del género policial. I Ficha del texto: género de texto, autor, personajes, tipo de narrador, pistas sobre el asesinato, causa de muerte, víctima, sospechosos, investigadores, cargo de la víctima, profesión del narrador, qué decía la pieza ausente, nombre del asesino, qué le envía Montaldo desde la cárcel. Preguntas: a)¿Por qué crees que el protagonista es llamado para ayudar a resolver el asesinato en el museo? b)¿Qué simbolismo crees que tiene el rompecabezas en relación con la vida del protagonista? c)¿Cómo crees que el protagonista se siente al encontrar la solución al crimen? d)¿Qué te dice el hecho de que Montaldo envíe rompecabezas desde la prisión al narrador? Escribe un nuevo relato con los mismos personajes, cambia profesiones y causa de muerte, víctima y victimarios. 
 Estudia sintácticamente los siguientes enunciados:

Las langostas. Crónicas marcianas de Ray Bradbury

Crónicas marcianas 
Las langostas 
Los cohetes incendiaron las rocosas praderas, transformaron la piedra en lava, la pradera en carbón, el agua en vapor, la arena y la sílice en un vidrio verde que reflejaba y multiplicaba la invasión, como espejos hechos trizas. Los cohetes vinieron redoblando como tambores en la noche. Los cohetes vinieron como langostas y se posaron como enjambres envueltos en rosadas flores de humo. Y de los cohetes salieron de prisa los hombres armados de martillos, con las bocas orladas de clavos como animales feroces de dientes de acero, y dispuestos a dar a aquel mundo extraño una forma familiar, dispuestos a derribar todo lo insólito, escupieron los clavos en las manos activas, levantaron a martillazos las casas de madera, clavaron rápidamente los techos que suprimirían el imponente cielo estrellado e instalaron unas persianas verdes que ocultarían la noche.
Y cuando los carpinteros terminaron su trabajo, llegaron las mujeres con tiestos de flores y telas de algodón y cacerolas, y el ruido de las vajillas cubrió el silencio de Marte, que esperaba detrás de puertas y ventanas.
En seis meses surgieron doce pueblos en el planeta desierto, con una luminosa algarabía de tubos de neón y amarillos bulbos eléctricos. En total, unas noventa mil persona llegaron a Marte, y otras más en la Tierra preparaban las maletas.
 Propuesta APE Actividades 
 1)Analiza gramaticalmente la siguiente estructura sintáctica, determina si hay un grupo oracional y cómo se relacionan estas oraciones.   Determina sujeto expreso, predicado, complementos del verbo. Los cohetes incendiaron las rocosas praderas, transformaron la piedra en lava…  
2)¿En qué lugar transcurren los hechos que se relatan?  
 3) Este texto se publicó en 1946 ¿por qué razón este escritor se considera un visionario a pesar de escribir ciencia ficción?  
 4)¿Qué rol cumplen las mujeres en este cuento? 
 5) ¿Por qué otra palabra de significado similar sustituirías a “algarabía”? 
 6)¿Qué nos permite interpretar el título del relato?  
 7)¿Cuáles habrán sido los principales desafíos de los colonos? 

Crónicas marcianas. El verano del cohete. Ray Bradbury

El verano del cohete 
 Un minuto antes era invierno en Ohio; las puertas y las ventanas estaban cerradas, la escarcha empañaba los vidrios, los trozos de hielo bordeaban los techos, los niños esquiaban en las pendientes; las mujeres envueltas en abrigos de piel, caminaban torpemente por las calles heladas como grandes osos negros. 
Y de pronto, una larga ola de calor atravesó el pueblo; una marea de aire tórrido, como si alguien hubiera abierto de par en par la puerta de un horno. El calor latió entre las casas, los arbustos, los niños. El hielo se desprendió de los techos, se quebró y empezó a fundirse. Las puertas se abrieron, las ventanas se levantaron, los niños se quitaron las ropas de lana, las mujeres guardaron en los armarios los disfraces de oso, la nieve se derritió descubriendo los antiguos y verdes prados del último verano. El verano del cohete. Las palabras corrieron de boca en boca por las casas abiertas y ventiladas. 
El caluroso aire desértico alteró los dibujos de la escarcha en los vidrios, borrando la obra de arte. Esquíes y trineos fueron de pronto inútiles. La nieve, que venía de los cielos helados, llegaba al suelo como una lluvia cálida.  La gente se asomaba a los porches húmedos y observaba el cielo, cada vez más rojo. El cohete instalado en su plataforma, lanzaba rosadas nubes de fuego y calor de horno. El cohete, de pie en la fría mañana de invierno, engendraba el estío con el aliento de sus poderosos escapes. 
El cohete transformaba los climas y durante unos instantes fue verano en la Tierra.
 Propuesta APE Actividades
 a)Resume el contenido del texto, recuerda usar tus palabras. 
 b) Estudia sintácticamente el siguiente enunciado: La nieve, que venía de los cielos helados, llegaba al suelo como una lluvia cálida. 
 c) Sustituye “que venía de los cielos” por un adjetivo que mantenga el mismo sentido que en el sintagma original. 
 d) Pon dos ejemplos de lenguaje figurado, explica qué artilugio lingüístico está presente en cada uno.
 e) Menciona los cambios que viven los pobladores con la partida del cohete.